Nuestra ruta comienza en Tornavacas, siguiendo la Calle Real, y atravesando el pueblo hasta encontrar frente a un antiguo Pilón la señal que nos indica el camino que tomó el monarca camino a su reposo en Yuste. Siguiendo el sendero de señales amarillas y blancas y el curso del río Jerte, continuaremos entre prados y huertas hasta adentrarnos en el Reboldo, espeso bosque de castaños de explotación maderera que ocupa la ladera de la Umbría de Jerte. En Otoño el cromatismo, junto al encuentro con las amanitas cesáreas y los boletus, nos evocan un paisaje de cuento, aunque la travesía puede hacerse en cualquier época del año.Poco a poco, y sin darnos apenas cuenta nos hemos adentrado en la Reserva y llegaremos al Puente Romano o Puente Nuevo (9.7 Km 3h), bello lugar que invita al descanso. A partir de este punto la ruta comienza una moderada subida en zigzag hasta a los Escalerones (1.283 m; 14 km), en cuyo borde se puede contemplar la profunda garganta de las Yeguas. Al otro lado, entre una vegetación muy espesa, comienza la última subida para coronar el collado de las Yeguas (1.478 m; 16,6 km). Después de admirar las maravillosas vistas de la comarca de La Vera, el sendero desciende por una zona de monte bajo con magnificas vistas a los pueblos de Cuacos de Yuste y, más al fondo, Jaraíz de la Vera. Alcanzaremos nuestra meta: Jarandilla de la Vera tras haber recorrido 28 Km y casi 1600 metros de desnivel acumulado . Cada año, a mediados de noviembre, numerosos clubes de montaña de todo el país organizan la travesía facilitando la organización; (ya que se trata una ruta lineal que necesita desplazamientos), y compartiendo un día de convivencia siguiendo los pasos del Emperador Carlos V. Por la longitud y el desnivel es una ruta exigente físicamente.